John Rivas crea pinturas figurativas sumamente expresivas en las que examina dimensiones socioeconómica, raciales y culturales de la vida de los inmigrantes. Su obra retrata las experiencias vividas por familiares cercanos y lejanos. Las gruesas pinceladas irregulares que emplea infunden una energía cruda a sus obras, un estilo de pintar que refleja el trabajo duro en las granjas, las obras de construcción y demás contextos de labor ardua en los que trabajan muchos de sus familiares. Yo Sola Lo Hice representa a la tía y los primos del artista en El Salvador. Al igual que en la mayoría de sus obras, Rivas incorpora objetos tridimensionales como significantes. Delinea los contornos del rostro de sus familiares adhiriendo frijoles: un alimento esencial para la mayoría de los salvadoreños, sin importar la clase social. Varios otros elementos asumen la condición de talismán: el zapato de niño, el bol con tortillas y la pequeña vasija de agua representan las necesidades básicas de la vida. La gorra de béisbol de los Yankees representa el sueño americano, mientras que un ratón de peluche y las plantas de interior artificiales evocan su humilde hogar familiar en el campo. El título alude a la proeza de su tía de asegurar la supervivencia de sus hijos con su propio esfuerzo y su determinación.